The Pogues ‎– If I Should Fall From Grace With God (1988)

Siguiendo las enseñanzas de The Clash, el Punk expresándose a través del folclore popular. The Pogues era el grupo que más me gustaba de la explosión de música celta que sufrimos en los '90. La voz aguardientosa de Shane MacGowan parecía salir de lo más profundo de un oscuro pub irlandés. Cuando la Guiness le salía ya por las orejas, fue el mismísimo Joe Strummer quien le sustituyó, siempre dispuesto a locas aventuras musicales.

The Clash - London Calling (1979)

Paul Simonon destrozando su bajo en la portada que tomaba prestada la tipografía del álbum debut de Elvis Presley. Porque había llegado el nuevo Rock, Revolution Rock, que habla de los problemas sociales, del dolor y la rabia de la gente y de la esperanza de la liberación.

Beastie Boys - Check Your Head (1992)

El Rap no es música porque los raperos no tocan ningún instrumento, solía decir orgulloso de mí militancia rockera. Hasta que una tarde, Miguel Merino me quitó la tontería. Te vas a cagar, me dijo. Me enseñó el interior de este álbum, con los tres beasties armados con guitarra, bajo y batería y me pinchó Time For Livin'. Ese pildorazo Hardcore era lo más salvaje que habían escuchado mis tiernos tímpanos rockabileros. Después había Funk, Bossa, Jazz, y, cómo no, Hip Hop. Pero estaban a otro nivel, tuve que admitir. Tío, es que son de New York. Ya te digo, anda ponme otra vez esa tan cañera.

Mighty Diamonds – Right Time (1976)

Estaba revolviendo discos en la sección de Reggae, en la planta de arriba del Madrid Rock (nunca lloraremos lo suficiente su desaparición). Entonces llegó un africano, grandote y elegante con su chupa de cuero. Fue directamente a la M. Movió un par de discos y sacó uno de golpe mientras su rostro se iluminaba con una gran sonrisa dental. Besó la portada y se bajó corriendo a pagarlo en la caja. Tardé un par de segundos en reaccionar y corrí a la M, ávido de una copia del álbum que me acababan de recomendar por vía indirecta y casual. No había más. En mi retina quedó esta portada con los tres diamantes poderosos con el torso desnudo y en mi cerebelo,  el deseo de escuchar su contenido. Apenas les conocía de algún recopilatorio y de ese extraño álbum Dub con The Icebreakers. Pero Right Time merece ese y muchos besos a lo largo de sus surcos. Canciones combativas de temática social, con las voces de ese maravilloso trío armónico. Bellas y pegadizas melodías y mucha contundencia Roots Reggae.

Miles Davis ‎– In A Silent WayIn A Silent Way (1969)

Un nuevo Kind Of Blue una década después. Miles Davis toma prestadas las maneras de grabar del Rock y se rodea de jóvenes promesas y sus instrumentos eléctricos: John McLaughlin, Chick Corea o Herbie Hancock. Un disco suave, vibrante e hipnótico.

Nirvana - Smells Like Teens Spirit

Me compré este Maxi por ansias. Un vendedor puso 4 vinilos de Bad Religion a precio de los años '90. Contacté con él, y con la prisa de que nadie me quitara el lote y con el afán de aprovechar gastos de envío, pues le encargué también este. Creí que era una edición no oficial del Nevermind que salió falsamente atribuída a México (utilizaron eso para poder colarlo en Europa como producto cultural de importación o algo así). Pillarlo era romper mi norma de no comprar en vinilo lo que ya tengo en CD, pero... Se trata de un álbum mítico, la edición es preciosa, está muy valorada en Discogs, marcó mi juventud, así redondeo el lote.... Hasta que no lo tuve en mis manos no me di cuenta de mi error.

Ha estado mucho tiempo enmarcado en nuestro pasillo. Junto a otros vinilos enmarcados que nos sirven de portafotos familiares. El cuadro se cayó al suelo y el vinilo sobrevivió. Entonces lo pinché por primera vez y... Vaya sonidazo! Como peran estos maxis a 45 rpm.

Mi primer CD: Johnny Burnette - Rockabilly Boogie

Esta auténtica joya del Rockabilly primigenio  fue mi primer CD. Lo tenía pedido en vinilo en mi tienda de discos favorita, Discos Del Sur. Pero no llegaba. El dependiente me decía:  "Lo tengo en CD. Aunque a los Rockers no os gusta ese formato. Pero el vinilo va a desaparecer y quedará este. Además tiene muchas más canciones que el vinilo". Al final me convenció y terminé haciéndole caso.

Sí, el Reguetón es música, amigos.

En los años 70 se hicieron quemas públicas de vinilos de música Disco. Se emplearon argumentos similares a los que hoy se oyen en contra del Reguetón. Supongo que más de un nostálgico se  tiraría hoy a esas llamas para salvar algún preciado primera edición. Hay quien dice que la diferencia entre música clásica y moderna es que la música moderna será la clásica del futuro. Añado que los clásicos del mañana no pueden ser conocidos hoy. Por eso me aburren las discusiones sobre Rosalía. El tiempo juzgará la música actual. Pero lo que es innegable es que esta es la música actual. El Regueton, el Trap, el Kuduro, etc. 

En lo años 80, las esposas de varios senadores lideradas por Tipper Gore (esposa del vicepresidente del gobierno con Clinton), iniciaron una cruzada contra el Rock con argumentos muy parecidos a los que se suelen emplear en contra del Reguetón: música horrible que convierte a la juventud en degenerados, incitación a la violencia y a la promiscuidad sexual, fomenta el hedonismo y va contra la educación y las buenas costumbres. Es paradójico que quienes aman un género que nació para provocar y se generalizó entre los jóvenes a base de escándalos (Elvis y sus caderas, Morrison y sus exabruptos contra lo establecido, los Stones y su apología de las drogas, los Pistols amenazando a la Gran Bretaña....), es increíble que peña que se emociona con videoclips de Hair Metal repletos de macizas en bikini que les rien las gracias a macarras que beben a morro de una botella de Jack Daniels, se escandalicen porque la juventud busca su perdición (uy, me ha salido un verso  de Vicio, un tema de Reincidentes que habla justo de eso, de como los viejos critican a los jóvenes por sus vicios con la hipocresía de no reconocer los suyos propios)

Mi abuela me decía: "¡Quita esa música ratonera!", cuando yo ponía discos de Elvis Presley con 15 años. Supongo que ella pensaría que eso no era música, era ruido a sus oídos. Pensaría también que alguien me estaba comiendo el coco para que me comprara discos cantados por extranjeros a los que no entendía, en vez de poner música de mi país, cantada en español por Antonio Molina, Juanito Valderrama o la Piquer, que eran sus favoritos y que a ella le emocionaban. Hay mucho Rock descerebrado, y que además se jacta de ello. Mensajes llenos de estupidez y mucho vacío (a veces me alegro de no saber inglés). El Rock es una música muy simple, unos pocos acordes repetidos machaconamente. Mi abuela no hubiera sido capaz de diferenciar a los Ramones de Pink Floyd. Para ella todo era el mismo ruido horroroso. A mi me va el rollo Rock and Roll básico y primitivo, y no entiendo mucho eso de grupos pretendidamente de "más calidad". Al final son gustos y también la música que escuchas en tu adolescencia. Es emocional.

Escuchar Rock hecho en 2019 no es escuchar música moderna, es seguir dando vueltas a un sonido con 60 años de historia. Los amantes de un formato vetusto como es el vinilo, no pueden negar cierto sesgo nostálgico y glorificador del pasado. Pero el Reguetón y derivados está suponiendo una latinización de la música de baile en los EEUU, que es donde se corta el bakalao (otra música denostada en su momento y por cierto reivindicada hoy). Y como tal pasará a la historia. Y generaciones futuras glorificaran con nostalgia estas canciones que formaron parte de la banda sonora de sus vidas. Y surgirán nuevos géneros musicales influidos por el Reguetón (que a su vez serán denostados por los puristas). 

Viajé a Centro América a principio de los 2000s. En esa época prácticamente sólo escuchaba Reggae. Me traje CDs de una nueva música que mezclaba Reggae, Dancehall, Cumbia, Hip Hop. O sea Reguetón. Se lo pasé a mis amigos y les moló. Luego llegó la oleada de reggaeton en las listas de éxitos y su demonización. Lógicamente llegaron canciones comerciales y destinadas a convertirse en hits inmediatos, no llegaron otros artistas con más calidad musical. No escucho Reguetón, ni Trap, pero los respeto, como lo que son. Los clásicos del futuro.

Los Coronas ‎– El Baile Final ... De Los Locos Y Los Cuerdos (2009)

Comenzaron a principios de los '90 predicando en el desierto sobre las bondades de la música Surf instrumental. Cabalgaron la ola provocada por Pulp Fiction y triunfaron en los festivales de revival Surf. Llegaron al nuevo siglo como uno de los principales referentes internacionales del género. Todo a base de un grandioso directo de electrizantes guitarras y con las simpáticas presentaciones de Fernando Pardo.

Bang Matu & Orquesta Kingston ‎– Magia Negra (2001)

Tras la separación de Malarians surgieron varios proyectos musicales interesantes. Begoña Bang-Matu, junto a Antonio José Iglesias (percusión) y Alberto Kiyoshi  (teclados), rescataron la magia del Latin Ska de su banda madre en este fantástico álbum.

Herbie Hancock ‎– Blow-Up: The Original Sound Track Album(1966)

Michelangelo Antonioni retrató en esta película la cultura Pop vanguardista del Londres de los años 60. Para ponerle música, buscaron un artista capaz de catalizar los sonidos más modernos y experimentales de la época. Herbie Hancock, entonces en el quinteto de Miles Davis, compuso una banda sonora cargada de Jazz sofisticado, con bases rítmicas proto-funk (Deee Lite samplearon una línea de bajo para su hit Groove Is In The Heart), elementos latinos, Free Jazz y mucho Groove.

El álbum recoge también el tema Stroll On que The Yardbirds interpretan en la película, con un jovencito Jimmy Page y un salvaje Jeff Beck, que destroza una guitarra en el escenario, para regocijo del público que se pelea por llevarse el mástil a casa.

The Jimi Hendrix Experience - Electric Ladyland (1968)

Jimi Hendrix regresó a Nueva York para grabar su tercer álbum, en el que dió rienda suelta a su creatividad y se permitió explorar sonidos, formatos y estructuras para concebir una genialidad.

Es el LP de Hendrix que menos he escuchado. No lo tuve original ni grabado en cinta. Tardé tiempo en hacerme con este vinilo. En principio, quería hacerme con la portada original, la de las tías en bolas. El precio me echaba para atrás. Pero luego pensé que en realidad es una portada bastante horrible. No me extraña que a Hendrix no le gustase. Aunque la que eligieron tras la censura recibida por la original es bastante sosa, al final me hice con esta.

Mala suerte la de este tipo con sus portadas. Para el Axis Bold As Love, pidió una ilustración que reflejase sus raíces indias (tenia sangre Cherokee). El dibujante le hizo una maravillosa portada doble pero basada en la cultura Hindú, de la India. A Hendrix no le gustó. A mí me encanta. Y por eso tengo un cuadro tamaño gigante de esa portada en mi casa.

Sharon Jones & the Dap Kings - Dap dippin' with Sharon Jones & the Dap Kings (2002)

Nació en Augusta (Georgia), al igual que James Brown. Pero no tuvo el éxito fulgurante del Rey del Soul. A ella el reconocimiento le llegó de forma más tardía. Grabó este, su primer álbum con 46 años. Aunque el sonido era pura retromanía: el primigenio Soul de Memphis y el profundo Funk setentero revisitados en el siglo XXI. Un poderoso bajo que te contagia las ganas de bailar y melodías pegajosas en la sección de metales, acompañan a la fiereza frenética de la voz de Sharon Jones. Una artista que lamentablemente nos abandonó en 2016 por culpa de un cáncer. Justo cuando había logrado convencernos de que el viejo Soul todavía podía seducirnos para llenar la pista de baile.

Triana - El Patio (1975)

El álbum comienza con Abre la Puerta, y el Rock entró en la casa del Flamenco. Los tres músicos que venían de otras experiencias con sonidos anglosajones, abrazaron sus raíces sevillanas para gestar un disco resplandeciente como una Luminosa Mañana.

Fugazi - Steady Diet Of Nothing (1991)

Crea tu propio sello discográfico. Cobra los discos a 10$ y las entradas de los conciertos e 5$. No hagas videoclips. No vendas merchandising. No permitas actos de violencia en tus conciertos. Apoya causas benéficas con tu música. Toca en  lugares inusuales para que cualquier persona pueda escuchar tu mensaje. Rechaza ofertas millonarias por grabar para una multinacional.

Fugazi creían que la mejor manera de lanzar un mensaje político era ser consecuente con ello. Decían que, tras 30 años de Rock protesta, las cosas habían cambiado poco. La única opción era predicar con el ejemplo. En una época en la que la industria musical mercantilizó el Punk, produciendo curiosas contradicciones entre mensaje y contexto, la única opción era más autogestión.  Do it yourself!

Steady Diet Of Nothing fue su segundo álbum. Después del éxito de Repeater,  recibió miles de peticiones antes de ser editado, en una época en la que no existían los "pre-orders". Es lo que tiene ser pionero en la auto-edición. 

Musicalmente es una continuación de su debut, aunque quizá un poco más rabioso en su ejecución. Las letras, como siempre, magníficas.

Albert King, Otis Rush ‎– Door To Door (1969)

Recopilatorio del sello Chess Records de estos dos grandes clásicos del Blues eléctrico de Chicago. Cuando lo escuché por primera vez pude descubrir las raíces que había tomado mi idolatrado John Mayall para su música. Aquí están las originales de All Your Love y So Many Roads, dos de las canciones que interpretó magistralmente Mayall una década después.

Gene Vincent & The Blue Caps - Cruisin' (1983)

Sigo con las películas mitificadas en mi adolescencia. Con estas pintas de arrabaleros elegantes aparecieron Gene Vincent y su banda en The Girl Can't Help It. Película protagonizada por Jayne Mansfield en 1956 y rodada exclusivamente para atraer al público juvenil apasionado con el novedoso ritmo del Rock and Roll. En ella hay también actuaciones de Fats Domino, Eddie Cochran o Little Richard, autor del tema que da título al film.

Gene Vincent y los suyos se marcan la actuación más salvaje de toda la peli, como unos auténticos wild cats que eran. En este recopilatorio que os muestro, la cara A es de 1956 y la cara B de 1958. La primera parte es muy salvaje, con solos de guitarra desbocados de Cliff Gallup (uno de los guitarristas que definió el género). En la otra cara están acompañados por un grupo vocal, a la moda Doo Wop (con todo un Eddie Cochran haciendo de bajo vocal). Supongo que influidos por los Jordanaires que acompañaban a Elvis Presley (con los que, por cierto, llegó a grabar un año antes). Dos caras de un artista que nunca perdió su espíritu Rocker.

Dell Vikings ‎– Come Go With Me

La canción que da título a este álbum aparece en American Graffiti (película dirigida en 1973 por un joven George Lucas) y Cuenta Conmigo. Dos de mis películas favoritas en la adolescencia. Las dos con grandes bandas sonoras basadas en éxitos de la década de los '50. Dell Vikings no es el grupo más famoso de Doo Woop, pero es el que yo más escuchaba de ese estilo musical de bellas armonias vocales. Y el único vinilo de este estilo que no vendí en la criba de discos de mi adolescencia que hice hace algunos años.

Los Tornados - Now's The Time (1991)

Ha regresado a mi colección. Cuando desempolvé mis discos hace unos años, hice una criba. Puse a la venta aquellos que habían dejado de gustarme. Me deshice de bastante material Rockabilly (banda sonora de mi adolescencia). Y así me financié la adquisición de los sonidos que me han ido acompañando en mi vida.

Cometí un error con este grupo. Me di cuenta antes de venderlo, al comprobar que seguía sonando bien. Pero no pude dar marcha atrás pues iba dentro de un lote bastante grande. 

El primero de Los Tornados lo conseguí poco después. Pero este se me había resistido. 

Hace poco, el comprador de estos discos se puso en contacto conmigo interesado en una nueva compra. Le dije que vale, pero que se lo cambiaba por este álbum y le cambiaba una copia del primer álbum por la que fue mía. Regateos aparte, para mi alegría, aceptó.

Now's The Time fue la última publicación de Los Tornados. Fue una banda que apostó por los sonidos añejos del Rockabilly, procurando ser fieles al sonido y estética de los '50. Pese a que el Rockabilly estaba de moda en los '80, ellos no tuvieron demasiada repercusión. No tenían nada que ver con la escena patria, que había desarrollado un estilo autóctono, mezcla de múltiples influencias tocadas con una actitud macarra. Ellos miraban a los grupos europeos de estilo más purista.

Cuando apareció Imelda May, me acordé de Los Tornados. Sobretodo de este disco. En el que rescatan versiones provenientes del Jazz, dotándolas de velocidad y en las que Anabel muestra su poderosa voz. Se atreven con el Now's The Time de Charlie Parker, luciendo nuevo saxofonista, en una de las dos instrumentales del álbum. 

La portada fue diseñada por Keko, ilustrador y original autor de comics.

Miles Davis - Bitches Brew (1970)

11 años después de revolucionar el Jazz con Kind Of Blue, Miles Davis volvió a darle un buen revolcón al género y parió una criatura conocida como Jazz Rock. Reclutó cuidadosamente a los músicos, de entre los más virtuosos e innovadores del momento. Metió en un estudio a Joe Zawinul y  Chick Corea al órgano, Wayne Shorter al saxo, John McLaughlin a la guitarra, Dave Holland al bajo, Bennie Maupin al clarinete, Larry Young a la batería, entre otros. Les ofreció muy pocas indicaciones sobre lo que iban a hacer. Nada de partituras, nada de acordes o estructuras. Quería llevar al Jazz la improvisación y el trabajo con el Estudio que realizaban los grupos de Rock. Admiraba la creatividad de Jimi Hendrix, la energía de James Brown, el desparpajo de Sly & The Familiy Stone.

Pidió a sus músicos que utilizasen instrumentos eléctricos y que se dejasen llevar. Les dijo a los ingenieros que grabasen todo lo que ocurría en el Estudio. Luego habría un proceso de mezclas, algo muy inusual en el Jazz, donde se solía grabar en una sola toma, para alumbrar esta genialidad que asombró a todo el mundo. 

Se llegaron a vender 1 millón de copias de un álbum de Jazz experimental. Se lanzaron versiones reducidas en single para poder radiarlas. Llegaron a presentar en directo el álbum en el festival de la Isla de Wright, referencia de la cultura Hippie, a la manera de las bandas de Rock.

El legado de ese disco se extendió con la carrera de cada uno de los músicos participantes. John McLaughlin fundó la Mahavishnu Orchestra. Chick Corea creó Return To Forever. Wayne Shorter y Joe Zawinul formaron Weather Report. Todos ellos fundamentales en la evolución del Jazz.

Mención aparte la portada, una ilustración surrealista y magnética de Mati Klarwein, autor también del arte de Abraxas de Santana.